RETENEDORES DE ACEITE

RETENEDORES DE ACEITE

Los retenedores de aceite son dispositivos usados para contener fluidos, aceite, grasa lubricante, agua etc, impedir contaminantes y en algunos casos para vencer presión o para separar fluidos.
Cualquier montaje mecánico que contenga fluidos, debe ser diseñado de tal forma que estos líquidos fluyan únicamente donde sea necesario y no escapen fuera del dispositivo a sellar. 

Los retenedores están diseños para prevenir escapes en los puntos donde confluyen diferentes partes o líquidos. Estos puntos de encuentro son conocidos como superficies de contacto, y el espacio entre ellos es llamado espacio de holgura, el propósito de un retén es bloquear el espacio de holgura de forma que nada pase a través de él.

PARTES DEL RETENEDOR

• Labio de Sello: La característica más importante de un retén es el labio de sellamiento en elastómero, para asegurar el contacto entre el labio y el eje que esta rotando, el labio debe presentar siempre un diámetro interior más pequeño que el diámetro del eje. La diferencia entre el diámetro del eje y el diámetro interior del labio se conoce como interferencia. Al incrementar la interferencia (por ejemplo modificando la longitud del resorte) incrementa la cantidad de fuerza sobre el eje, incrementando así la fricción y el desgaste. El disminuir la interferencia (por ejemplo, agrandando el diámetro interior del labio) reduce la fuerza sobre el eje dejando escapes.

• Caja Metálica: La caja hace dos cosas por el retenedor: Primero, provee estabilidad, permitiendo al diámetro exterior entrar a presión y ajustado en el alojamiento evitando el escape. Segundo, la caja también provee protección, previniendo el daño del labio durante la instalación.

• Resorte: El resorte cumple dos funciones principales: primero contribuye a la fuerza de sellamiento radial total o carga, entre el labio y el eje. Segundo, el resorte también ayuda a asegurar que se mantenga la cantidad deseada de carga incluso cuando el material del labio se hinche y ablande debido a la exposición al lubricante a alta temperatura.
Un labio que se ha hinchado es menos capaz de mantener un contacto consistente con el eje sin la ayuda de un resorte. Un contacto inconsistente propicia el escape. El resorte endurece artificialmente al labio, y esto ayuda a mantener al labio en su lugar.

• Labio Secundario o Guardapolvo: Además del labio de sellamiento primario, existen retenedores que incorporan uno más pequeño, el labio secundario. La función de este es excluir polvo, suciedad y otros contaminantes. A diferencia del labio primario, este labio secundario está comúnmente de frente, para evitar contaminantes del medio ambiente (dado que el polvo y otras materias contaminantes pueden intentar entrar hacia el interior del motor o de la pieza a sellar).
Son variados los factores que influyen en el funcionamiento adecuado de un retenedor. Los que más influyen son la temperatura, la instalación, el tipo de fluido, sea aceite grasa o agua, compatibilidad química entre compuesto y fluido, entre otros.

Los materiales comúnmente usados para retenedores de sellamiento son nitrilo, silicona, poliacrílico y fluoroelastómero.
El material es importante porque determina la expansión del labio con la temperatura. Las propiedades del material y sus cambios por el contacto con el aceite y la temperatura deben ser conocidas para tenerlos en cuenta. Nitrilo resiste temperatura hasta los 120 grados C, Poliacrilico hasta los 170 grados C, y poliacrilico y fluoroelastomero hasta los 220 grados C.
La duración de los retenedores depende de los siguientes factores:

Labio Flexible. El labio de sellamiento debe contar con la flexibilidad necesaria que le permita en todo momento, mantener el contacto con el eje o con la camisa de sello.
Distribución de la presión de contacto del labio. La presión de contacto del labio sobre el eje o camisa de sello debe cumplir con las especificaciones de sellamiento tanto en movimiento como en reposo.

Resistencia a la Vibración. El diseño del retenedor debe resistir la vibración y a la resonancia, que pueden causar que se presente escapes, a causa de pérdida de contacto entre el labio de sellamiento y el eje que esta girando.

Resistencia del Retenedor a la Deformación. El retenedor debe soportar pequeños incrementos y descensos de presión sin que haya escape.

Capacidad de sellamiento estático. El retenedor debe sellar varios niveles de lubricantes en una condición de alta temperaturas incluso cuando se presente desalineación normal.

Capacidad de Instalación. El retenedor debe ser fácil de instalar para evitar daños al mismo.

Carga Radial. El labio principal debe tener la cantidad apropiada de presión sobre el eje o camisa de sello. Demasiada presión causa que el retenedor se desgaste rápidamente. Muy poca presión causa escape de fluido.

A medida que pasa el tiempo, los retenedores y otros productos de caucho pueden experimentar cambios en sus propiedades físicas, incluso se pueden volver inservibles debido a un endurecimiento excesivo, ablandamiento, agrietado y otras degradaciones, estos cambios pueden ser el resultado de factor único o de una combinación de factores tales como la adición de oxígeno, ozono, luz, calor, humedad, aceites, agua, u otros solventes. Sin embargo, los efectos perjudiciales de estos factores pueden ser minimizados mediante condiciones de almacenamiento.

Tipos de retenedores:

Dependiendo de la aplicación se pueden encontrar diferentes tipos de retenedores, que se diferencian principalmente por presentar variaciones en su recubrimiento que le brindan mayor resistencia en el montaje.
Los retenedores pueden presentar labio secundario o guardapolvo y las aplicaciones que demandan mayor fuerza del retenedor pueden utilizar caja interior que se inserta en la caja exterior.
La función de la caja interior es proteger el labio y el resorte durante la manipulación y la instalación.
Los retenedores exteriores en metal han probado mucha efectividad cuando se ubican en alojamientos de hierro fundido y acero.

Los retenedores con exterior en caucho se usan a menudo es el caso de los alojamientos en aluminio, en donde este último se expande aproximadamente dos veces la proporción del acero.
La selección del retenedor adecuado para la parte a sellar es muy importante, a la hora de ser reemplazados, no cualquier retenedor sirve, existen muchas marcas homologadas de buena calidad, el error viene cuando la persona que los vende no está capacitada para brindar la mejor opción o retenedor adecuado, es por esto que se agravan las fugas de aceite, y en ocasiones, puede llegar a dañar el eje, produciendo ranuras que hacen necesario cambiar la parte giratoria que se quiere sellar.

Atención en utilizar el reten original en lo posible o uno homologado que sea para la aplicación que se necesita, sea de motor, transmisión de velocidades, rodamientos ruedas etc. Siempre deben estar empacados al vacío o en un empaque sellado, nunca se debe instalar un reten que no esté empaquetado.

WILDER BLANCO
MECATRONNIX